SENDERO SALINA SANTA MARÍA DE JESÚS (CHICLANA)
El día 17 de noviembre se realizó la actividad “Sendero Salina Santa María de Jesús” en Chiclana.
En el recorrido participaron treinta de nuestros senderistas, guiados por nuestro compañero Francisco Salado que les ayudó a distinguir una gran variedad de aves limícolas. Visitando también el centro de recursos ambientales, donde se les explicó el funcionamiento de las salinas artesanales.
FICHA DEL SENDERO
Recorrido | Longitud total | Duración | Dificultad |
Circular | 5,5 km | Aprox. 3h y media
(incluida visita al Centro Salinas de Chiclana) |
Baja |
Protección | |||
Parque Natural Bahía de Cádiz
Lugar de Interés Comunitario (LIC) Zona de Especial Protección de Aves (ZEPA) Humedal designado como de importancia internacional bajo la Convención de Ramsar (Sitio Ramsar) Plan Especial de Protección del Medio Físico (PEPMF). |
SALINA SANTA MARÍA DE JESÚS
Es una de las 49 salinas que había en el término municipal de Chiclana y unas de las 149 de la Bahía de Cádiz. Separada de la salina de Carmen de Bartivas con el cambio del curso del Río Íro.
1988 fue su último año en activo, separada de la salina de Carmen Bartivas antes de convertirse en Centro de Recursos Ambientales, actualmente propiedad del Excmo. Ayuntamiento de Chiclana y concesión de la empresa privada Alema Turismo y Medioambiente, S.L.
En la prehistoria surgen las pozas de los acantilados afectados por las mareas más vivas. Ya entonces se recogía agua con una pala y esa misma agua se depositaba en un recipiente de barro que se ponía a calentar. Después se partía el recipiente para obtener la sal.
Durante la época fenicia y romana se comienza a transformar los terrenos marismeños para adaptarlos a la producción salinera, adquiriendo una fama universal. Constaban únicamente de canales que abastecían a un solo estanque, en el que se mantenía agua de mar hasta obtener cierta cantidad de sal.
Y es ya en la Edad Media, a partir del siglo V- VI, cuando se constata el uso de 2 estanques, que fueron adquiriendo más complejidad hasta dar lugar a algo similar a lo que hoy conocemos como salinas. Tras la reconquista cristiana, la extracción y el comercio de sal se convierten en el principal recurso económico de la comarca. Se destinaba a la conservación del pescado obtenido en las pesquerías. La ligazón con la almadraba continuó invariablemente durante este periodo y es hasta el último cuarto del siglo XIX donde se pone en marcha el primer buque frigorífico.